Eno

Luceli Puerto

Hace 4 meses

Las lentejas estaban muy ricas, la tlayuda igual. Lo que más me gustó fue el panecito de almendra con cáscara de naranja y orujo, dejaba una sensación refrescante y la textura es muy buena. El lugar es bonito.

Gerardo Vela

Hace 5 meses

Llegamos de noche, ya sobre el cierre. Nos atendieron muy amablemente, sin jetas y con rapidez. Fueron claros al decirnos que ya estaba por cerrar cocina, así que me gustaría regresar un día con más calma para probar otros platillos. Pedí un plato de salmón y fue bastante rico, pero no se me hizo nada extraordinario. El agua de frutas frescas muy sabrosa. En general, un lugar interesante, con comida rica, pero costosa. En una próxima ocasión probaré algo distinto para tener una nueva opinión.

Sheyla Leon

Hace 5 meses

Visité Café Eno en Polanco y salí encantada. Los huevos rancheros estaban perfectamente preparados, con una salsa equilibrada y tortillas que se sentían caseras. El tamal vegetariano fue una grata sorpresa: suave, lleno de sabor y acompañado de una salsa deliciosa que realzaba todos los ingredientes. Y para cerrar, el pudín de chía fue ligero, fresco y justo lo que necesitaba para terminar el desayuno con un toque dulce pero saludable. El lugar tiene un ambiente relajado, con un diseño simple pero acogedor, ideal para desayunar sin prisa. La atención fue amable y el servicio fluido. Se nota el compromiso con la calidad de los ingredientes y la propuesta consciente del menú.

Pedro Martin Gomez

Hace 5 meses

EN general tenía ganas de ir a Eno, ya que la fama en los desayunos es bastante grande. El Menú es extenso en desayunos y te atienden rápidamente. Pedí unos huevos rancheros , pan dulce, agua mineral y café. La cocina y los alimentos son de alta calidad, pero sinceramente esperaba más de ellos. La oreja que pedí , estaba bastante mala, sabía demasiado a mantequilla, ni la terminé. Como comentario diré que no entiendo como pueden cobrar tanto por el agua mineral. 80 pesos me parece muy excesivo.

Cecilia

Hace 7 meses

La comida y las bebidas estuvieron ricas. El chocolatín nos gustó más que el panqué de plátano. El servicio de la primera persona que nos atendió fue muy bueno, fue muy amable. Casi nadie habla del baño, pero ahí es cuando dices “cada detalle cuenta” está muy limpio, el aroma que le ponen delicioso y la música que ponen te hacen sentir en un spa.